¿Y si la comedia sirviera para algo más que reír?

Te voy a preguntar algo.

¿Recuerdas a tus profesores favoritos de la infancia?

Déjame adivinar: eran los que te hacían reír. Los que convertían la clase en algo divertido, ¿verdad?

Y ahora te hago otro truco de mentalismo: seguro que también aprendiste más en esas clases. Que esas asignaturas se te hacían más llevaderas. Qué casualidad, ¿no?

Pues no. No es casualidad.

La risa es el lubricante emocional de la existencia.
O como dice el gran Andreu Buenafuente:
«La risa es la única salida.»

Quizás por eso, quienes nos dedicamos a esto recibimos tantos mensajes bonitos.
«Te veo para olvidarme de mis problemas«, nos dicen a menudo.
Y ojo… durante mucho tiempo pensé que era el mejor halago que me podían hacer.

Pero un día me di cuenta de que, en el fondo, esa frase tiene trampa.

Es como cuando salías con alguien (sobre todo en la adolescencia)y te decía “Sin ti no soy nada”.
¿Perdona? ¿Nada? ¿Y qué hago yo con alguien que no es nada?
Nada sexy, nada divertido, nada estimulante. ¿Dónde firmo para salir corriendo?

Pues eso de “te veo para olvidar mis problemas” es parecido.

Porque los problemas no están ahí para que los ignores.
Están para que los enfrentes.
Para que los vivas.
Para que aprendas, cambies y salgas reforzado.

Como dijo un sabio profeta manchego (o sea, yo):
“Buscad problemas, pues en ellos encontraréis la salsa de la vida.”

Yo ahora estoy en ese punto: transformándome.
Quiero que mi comedia no solo te haga reír,
sino que te sirva.

Que sirva para algo más que para lo que fue concebido, como un vaso de nocilla que al terminarlo lo friegas, le sacas la pegatina y tienes un vaso nuevo en la vajilla!! Con la tapa tienes un frisbee y 2 kilos de más.

Quiero que mi comedia sea una linterna en tus túneles.
Vicks VapoRub en tu pecho cuando estás constipado.
¿sabes ese papelito doblado varias veces para ponerlo debajo de la pata de una mesa coja? 

Pues algo así, se me ha ido un poco la olla con las metáforas ¿no? En fin…concluyo.

¿Es difícil? Sí.
¿Pero sabes qué?
Lo fácil es aburrido. Lo difícil, divertido.
(Eso también lo dijo el profeta Juanjo.)

¿Y tú? ¿Qué problema has convertido últimamente en comedia o en aprendizaje? ya sabes que puedes contestar al mail.
Te leo.

Y si no sabes cómo convertirlo en comedia recuerda que puedes hacerlo con el método Sinvergüenza, mentorías privadas donde te ayuda a sacar una risa donde crees que no puede haberla.

🎤 ¿Estás organizando un evento y buscas a alguien que haga reír de verdad?

No solo a alguien que suelte chistes al tuntún, sino a un monologuista profesional que conecte con tu público, que haga humor con alma, y que convierta una noche cualquiera en un momento inolvidable.

Entonces, igual nos estamos buscando mutuamente.

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Si esto que acabas de leer te ha hecho reír, pensar o emocionarte, imagina lo que puede pasar en vivo.

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